La gestación del séptimo episodio de «Star Wars» sigue siendo la gran vedette de los medios especializados, sobre todo por el baile de nombres que provoca. Al menos, un puesto clave del futuro filme está ya confirmado: el de guionista, responsabilidad que recae en Michael Arndt, favorito del «clan Pixar» por ser el autor del fabuloso guión de«Toy Story 3», aparte de ganar el Oscar por el de «Pequeña Miss Sunshine». Arndt ya ha enviado un primer tratamiento de 50 páginas sobre la historia del «Episodio VII», que retomará los personajes de Luke Skywalker, Leia y Han Solo, ya en plena tercera edad. Por tanto, el próximo reto es fichar a Mark Hamill, Carrie Fisher y Harrison Ford, actores que los interpretaron en la primera trilogía.
Otro candente foco de atención importante es saber quién ocupará la silla de director, con Brad Bird como uno de los candidatos principales después de que un par de pesos pesados hayan dicho un rotundo no: Quentin Tarantino («no soy fan de la saga, sobre todo si la va a hacer Disney», declaró) y Steven Spielberg, que se autoeliminó confesando: «¡No, no es mi género! Es el de mi mejor amigo George». Como si la ciencia ficción no fuera con el autor de «Encuentros en la tercera fase», «E.T.», «Minority report», «Inteligencia Artificial», «La guerra de los mundos»... Tampoco están muy por la labor Zack Snyder («es un trabajo peliagudo», se escaqueó recientemente el director de «300» y «El hombre de acero»), ni J.J. Abrams, enfrascado en la secuela de la precuela de otra saga igual de mítica, «Star Trek». ¿Quién se hará cargo al final de poner en su sartén la patata caliente?
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